Como cada mañana me despierto lentamente,
dando tiempo a mis ojos a reconocer el entorno: la mesa llena de papeles, el
flexo que nunca enciendo y que está amenazado por una pila de libros que lo
rodean….es entonces, y solo entonces, cuando ya tengo los ojos totalmente
abiertos, que busco el móvil. Abro la carpeta de las fotos y busco una en
concreto….ahí estas:
Te colaste en una maravillosa instantánea del cielo del amanecer: el amarillo mezclándose con
el rosa pálido, algo de gris, otro poco de azul eléctrico…las montañas
empezaban desplegar su vestido de
colinas verdes, moteadas de gris (¿o era al revés?)
Apareciste justo en el momento de hacer clic
con la cámara del móvil: tus botines negros y pantalones del mismo color,
enfundaban unas piernas que hablaban de caminos abiertos a mordiscos, de letanías
interminables, de algo sagrado que ocultas.
¿Por qué no te quitas las gafas? ¿Me dejas ver
que hay detrás de esas gafas de sol? Son como murallas, como puertas metálicas.
Un día mas, y ya no puedo contar cuantos van,
me vas a dejar con la intriga, y yo tengo que marchar a mis labores, porque soy
un hombre normal , incluso gris, que no puede quedarse detenido en el tiempo de
una fotografía. Prometo ir todos los días a ese mismo sitio donde te conocí,
por si te veo pasar, y capturarte en fotos…aunque tú no lo sepas. Me inventaré
nombres:
Hoy te llamarás Elisa, ¡no! mejor Paz… ¿no te
gusta ninguno? No se me da bien, pero es que tu cara me sugiere mil cosas menos
una fundamental, sin la que no puedo empezar a decirte nada: Tu nombre.
Está bien, juguemos a inventar:
¿Eres de aquí? No tienes pinta de ser de muy
lejos, a lo mejor ibas a un recado nada más, porque no pareces turista: tu
caminar tiene ese aplomo de quien conoce perfectamente por donde va, no como un
turista que suele verlo todo y caminarlo todo con un aire de deslumbramiento.
¿Te espera alguien? Ese movimiento acelerado
que se nota en la foto (una de tus piernas ha salido borrosa) indica que si…o
tal vez eres impaciente ¿lo serias conmigo?...en fin. Hasta mañana querida
desconocida, que tengo muchas preguntas que hacerte pero mi tiempo es breve.
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